Garantizar la seguridad de los trabajadores y de la obra es fundamental, en posts anteriores hemos hablado de las medidas de seguridad obligatorias, y en esta ocasión hablaremos de un mecanismo adicional de protección: redes o mallas protectoras para andamios.

Estas mallas están fabricadas en materiales de gran resistencia y con un alta aguante frente a las distintas condiciones climáticas. Generalmente se realizan cuadriculas de pequeño tamaño, para que la zona quede perfectamente protegida. Se fabrican en diferentes colores, siendo los más comunes el verde, el gris y el azul.

Estas mallas cubren el andamio de arriba abajo para evitar la caída de herramientas, cascotes o pequeñas partículas al exterior o a la calle. Esto permite proteger tanto a trabajadores como a transeúntes que puedan circular cerca de la obra, y por tanto hace que las obras sobre fachada sean más seguras.

En términos legales, según el Real Decreto 1801/2003 de 26 de diciembre se considera que una red de obra para construcción segura será efectiva si cumple los requisitos técnicos según la normativa europea EN 1263:2004 tanto por la parte que afecta a los fabricantes, encargados de seguir los métodos de ensayo según la norma como por parte de los instaladores de medidas anticaídas.

Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que las mallas de protección que se emplean para restauración de fachadas y en zonas de peligro, no pueden considerarse nunca como sistemas de seguridad o de prevención. En otras palabras, las redes son elementos complementarios para la seguridad, pero por sí solas no tienen capacidad de salvar la vida de un trabajador en caso de accidente.

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